SEXUALIDAD: #MARIANAKERSZ #ESI #EDUCACION

Fuimos educados en sexualidad por generaciones que no recibieron una educación sexual adecuada, y la poca información que nosotros tuvimos en la escuela estuvo centrada en la fisiología del aparato reproductor. Este tipo de no-educación sexual, limitada, reduccionista y restrictiva, deja por fuera los valores, las actitudes y la conducta responsable para una sexualidad respetuosa para con uno mismo y el otro. Esa no-educación también fue durante muchos años un modelo de aprendizaje de una sexualidad silenciada, ajena, ligada a la biología, al órgano, a la fecundación. Así aprendimos a desconocer el placer, el disfrute, el cuidado y el amor por el cuerpo propio, la aceptación y la responsabilidad del inicio del momento de tener relaciones sexuales. Un aprendizaje que hoy estamos resignificando gracias a la Ley de Educación Sexual Integral, que entre muchas otras cosas, nos permite entender las grandes diferencias entre la anatomía y el deseo